Caos en el gobierno: la inflación llegaría al 150 por ciento para fin de año y a 170 en los próximos 12 meses
El informe REM del Banco Central confirmó un violento aumento de las expectativas inflacionarias para los próximos meses.
El estallido de los precios se acelera cada vez más. El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) elaborado por el Banco Central confirmó que las proyecciones inflacionarias se dispararon a niveles alarmantes. Las principales consultoras del país esperan que la inflación alcance por lo menos el 148,9 por ciento en diciembre, aún bajo un escenario optimista.
Se trata de un salto de hasta 22,5 puntos porcentuales con respecto a la expectativa del informe anterior, y simplemente constituye la mediana de las estimaciones, con lo cual existen escenarios en donde la inflación fácilmente podría acercarse al 200 por ciento interanual para fin de año.

De acuerdo a estos pronósticos, la tasa de inflación mensual no bajaría nunca del 7,6 por ciento, y llegará a un récord de hasta 9 solamente en mayo. Nuevamente, esto contrasta dramáticamente con respecto al 7 mensual que se estimaba en el anterior informe REM.
Asimismo, la inflación interanual alcanzaría un máximo de hasta el 171,1 por ciento el mes de mayo de 2024, la estimación para los próximos 12 meses desde la elaboración del informe. Se registró un fuerte aumento de 24,6 puntos porcentuales con respecto a las expectativas relevadas en abril, y cabe resaltar que siguen siendo datos optimistas porque solo se señala la mediana de las expectativas, el valor medio de entre todos los puntajes recolectados por el BCRA (existen otros mucho más extremos).
Sin lugar a dudas el programa Precios Justos no logró cumplir el que fuera su objetivo públicamente anunciado por el Gobierno: producir una “tendencia hacia la baja” sobre la tasa de inflación mensual hasta converger al 3 por ciento. En la práctica, los precios están aumentando a un ritmo casi tres veces superior.

El evidente desanclaje de las expectativas no es sino la contracara de la fuerte caída de la demanda de pesos, medida por cualquier agregado monetario que se tenga de referencia. La oferta de pesos (base monetaria, depósitos a la vista, cuentas corrientes, etcétera) está creciendo a un ritmo menor al que crecen los precios, y la velocidad de circulación de los mismos es cada vez más rápida.
Los mercados esperan que el dólar oficial se encuentre en un valor cercano a los 500 pesos para fin de año, y considerando una brecha cambiaria similar a la que existe hoy, no resulta para nada descabellado esperar un tipo de cambio paralelo de más de 800.
Las incesantes intervenciones sobre el tipo de cambio alternativo en los mercados legales (el CCL y el dólar MEP) evitó una espiralización de expectativas aún mayor, pero de ninguna manera evitó aminorar el proceso inflacionario que efectivamente se está desarrollando.
La principal estrategia del equipo de Economía es ampliar el poder de intervención del BCRA a través de las reservas conseguidas por endeudamiento externo. Al mismo tiempo, se espera poder concretar una quinta revisión en el acuerdo con el FMI, para garantizar la llegada de los próximos desembolsos.